El parlamento logra consenso unánime y abre paso a la sucesión constitucional en medio de crisis política y protestas sociales
Una moción largamente esperada
El Congreso de Perú aprobó la vacancia presidencial de Dina Boluarte con 118 votos a favor, ninguno en contra ni abstenciones, superando ampliamente los 87 necesarios. La medida se sustentó en acusaciones de incapacidad moral permanente y un respaldo que se desvaneció entre las bancadas que hasta ahora la sostenían.
Boluarte, de 63 años, rechazó ejercer su derecho de defensa alegando que no se estaba respetando el debido proceso. La presidenta llegó al poder tras la destitución de Pedro Castillo de quien era vicepresidenta luego de que él intentara disolver el Congreso.
Factores detonantes y cuestionamientos
Desde el inicio de su gestión, el gobierno enfrentó múltiples pedidos de vacancia (ocho en total), aunque ninguno prosperó hasta ahora. Los parlamentarios que la apoyaron Fuerza Popular, Alianza para el Progreso y Renovación Popular voltearon en el momento crítico y respaldaron las propuestas de remoción.
Los impulsores del juicio político señalaron:
Denuncias de enriquecimiento ilícito por supuestos relojes de lujo.
Responsabilidad por la muerte de decenas de personas en protestas ocurridas entre 2022 y 2023, donde se acusó al Estado de represión excesiva.
Incapacidad del gobierno para contener la ola de violencia, criminalidad y extorsión creciente.
El descontento social se manifestó frente al Palacio Legislativo, donde manifestantes celebraron la destitución con banderas y pancartas.
Consecuencias inmediatas y rumbo político
Con la vacancia consumada, se activó la sucesión constitucional establecida en la Carta Magna peruana. Los nuevos gobernantes asumirán el poder hasta las elecciones previstas para el 12 de abril de 2026, momento en el cual se renovarán cargos presidenciales, legislativos y senadurías.
Este episodio coloca de nuevo al país en un escenario de elevada tensión política, donde la legitimidad, la estabilidad institucional y la urgencia de reformas estructurales se convierten en el núcleo del debate nacional.