La presidenta fue tajante ante los cuestionamientos de la prensa
La presidenta Claudia Sheinbaum reafirmó que su estrategia de seguridad seguirá enfocada en la construcción de paz y en la erradicación de la impunidad, sin llegar a pactos con el crimen organizado. En su conferencia matutina de este lunes, Sheinbaum señaló que no se regresará a estrategias pasadas, como la guerra contra el narcotráfico, y subrayó que sus consecuencias aún afectan al país.
Ante preguntas sobre la posibilidad de acuerdos con organizaciones criminales, como lo sugirió el diputado Manuel Espino, Sheinbaum fue contundente al afirmar que su gobierno no negociará con delincuentes. Esta postura se suma a su enfoque de atender las causas sociales de la inseguridad, en lugar de fomentar confrontaciones directas.
La mandataria también se refirió a la situación de violencia en Sinaloa, donde destacó que los enfrentamientos actuales se deben a conflictos entre grupos rivales. Indicó que en la reunión del gabinete de seguridad de mañana se ofrecerán más detalles sobre las acciones en ese estado.
En cuanto al caso del sacerdote Marcelo Pérez Pérez, Sheinbaum informó que ya se detuvo a un sospechoso y que las investigaciones están en curso. La Iglesia Católica había pedido al gobierno tomar medidas ante el aumento de violencia, y Sheinbaum aseguró que se está atendiendo el caso con seriedad.
Claudia Sheinbaum reiteró su compromiso con una política de seguridad que priorice la justicia y el desarrollo social, dejando claro que la negociación con grupos criminales no forma parte de su estrategia.